1/4 de zapallito italiano sin pepas, en cubos pequeños
1 pimiento sin pepas, en cubos pequeños
1/2 cebolla pequeña picada
3 cucharaditas de pasta de tomate
1 cucharada de maicena
1/2 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de azúcar
1/2 bola de queso mozzarella en cubos pequeños
1 receta de masa base (Receta de Calzone mixto)
1 huevo batido
Preparación:
En una sartén a fuego medio, calentar el aceite, agregar los champiñones, la berenjena, el zapallito italiano, el pimiento y la cebolla.Verter 5 cucharadas de agua y cocinar durante cuatro minutos, hasta que las verduras estén suaves. Añadir la pasta de tomate y cocinar durante dos minutos más.
En un bol, mezclar la maicena con una cucharada de agua. Incorporar la maicena a la preparación anterior y remover durante un minuto, hasta que tome cuerpo. Sazonar con la sal y el azúcar. Retirar del fuego y dejar enfriar. Añadir la mozzarella y mezclar.
Formar cuatro discos con la masa base y distribuir el relleno en el centro de cada uno. Doblar los discos de masa por la mitad. Repulgar el borde con los dedos o con la ayuda de un tenedor.
Colocar los calzone sobre una lata para horno enharinada, pintar encima con el huevo y llevar al horno precalentado a 190ºC, entre 12 y 15 minutos.
En una sartén a fuego medio, calentar el aceite y saltear los champiñones durante un minuto. Retirar y reservar.
En una olla a fuego medio, derretir la mantequilla, agregar la harina y remover hasta formar una pasta. Añadir la leche de a pocos y batir con un batidor de mano hasta que no haya grumos y se pueda obtener una salsa blanca.
Incorporar a la salsa los champiñones salteados, el queso mozzarella y el queso parmesano, sazonar con sal.
Formar cuatro discos con la masa base y distribuir el relleno en el centro de cada uno. Doblar los discos de masa en dos y repulgar el borde con los dedos o con la ayuda de un tenedor.
Colocar los calzone sobre una lata para horno enharinada, pintar encima con el huevo y llevar al horno precalentado a 190ºC, entre 12 y 15 minutos.
Para la masa base, en un bol, mezclar la harina, la levadura, la sal y el azúcar.
Añadir media taza de agua y mezclar con las manos hasta integrar.
Añadir la manteca y continuar amasando hasta que la masa no se pegue a la mesa. Dejar reposar durante 10 minutos.
Luego de dejar reposar, dividir la masa en 4 porciones iguales.
Sobre una superficie enharinada, extender cada porción con un rodillo, hasta formar discos de igual tamaño.
Para el relleno, mezclar el jamón, el queso mozzarella, el queso parmesano, el azúcar, la sal, la pasta de tomate y el orégano, y colocar un cuarto del relleno en el centro de cada disco de masa.
Doblar cada disco por la mitad formando los calzone.
Repulgar el borde con los dedos o con la ayuda de un tenedor.
Colocar los calzone sobre una lata para horno enharinada.
Pintar los calzone con el huevo batido.
Llevar al horno a 190ºC, entre 12 y 15 minutos. Retirar y servir caliente.
Colocar en una olla las caiguas y cubrirlas con agua. Llevar a fuego medio hasta que den un hervor.
En una sartén, freír la cebolla y el ajo a fuego medio. Cuando estén dorados, separar 2 cucharadas del aderezo en un bol. Agregar a la sartén la carne molida, las pasas, el perejil, la quinua y salpimentar. Mezclar bien y cocinar a fuego bajo. Espesar la preparación con la harina; disolverla bien. Cuando la carne esté cocida, apagar el fuego. Añadir el huevo y las aceitunas. Mezclar bien para incorporar los ingredientes. Apagar el fuego y rellenar las caiguas con la preparación anterior.
En otra olla, colocar las cucharadas de aderezo reservadas. Añadir la pasta de tomate, el huevo batido y el agua. Salpimentar al gusto. Cuando la preparación haya hervido, disponer las caiguas rellenas y cocinar a fuego medio durante 15 minutos, hasta que estén cocidas. Servir.
300 gr de queso fresco serrano, cortado en rebanadas
1 kg de papas blancas cocidas, peladas y cortadas en rebanadas de 1 cm.
Sal
5 cucharadas de queso parmesano, rallado
¼ de taza de vinagre
Pimienta
6 rocotos limpios
Preparación:
Cortar a 6 rocotos una tapa en la parte del tallo. Sacar las pepas y venas. Cocinar en abundante agua con sal y ¼ taza de vinagre. Repetir esta operación tres veces. Esto se hace para que el rocoto no pique demasiado. Si se desea más picante, hervir menos veces. Reservar.
Engrasar una fuente refractaria, acomodar la mitad de las papas y encima la mitad de las rebanadas de queso fresco. Cubrir con el resto de las papas.
En un recipiente mezclar 3 huevos con la leche, sal, pimienta, queso parmesano rallado y verter encima de las papas.
Desmenuzar el queso fresco restante y rellenar la cavidad de los rocotos. Acomodar encima de las papas en el molde.
Batir las 3 claras restantes a punto de nieve y agregar las yemas. Sazonar. Cubrir lo preparado con este batido. Rociar con aceite y llevar al horno precalentado a 350°C (180°F) hasta que cuaje.
En una olla a fuego medio, calentar dos cucharadas de aceite y dorar un diente de ajo por un minuto. Bajar el fuego, incorporar las lentejas junto con el laurel y el caldo de pollo, y sazonar con sal. Cocinar por 20 minutos, hasta que las lentejas estén al dente. Retirar del fuego, colar y reservar.
En otra olla a fuego medio, calentar el aceite restante y dorar el ajo por un minuto. Incorporar la cebolla y rehogar por seis minutos. Agregar el tomate,el orégano y los pimientos, sazonar con sal y pimienta, y cocinar por cinco minutos más.
Añadir las lentejas y media taza del caldo de cocción, cocinar por 10 minutos. Retirar del fuego, colocar en platos hondos refractarios o pequeñas ollas de barro y verter encima los huevos batidos.
Llevar al horno a 180º C, por 20 minutos. Retirar del horno, dejar reposar por 5 minutos y servir.